miércoles, 2 de marzo de 2011

|Todos Odiamos ir al Dentista...

Creo que no hay alguien todo el mundo al que le guste ir al infame dentista. Un lugar al que todo mundo prefiere evitar ir en lo más posible, una muy mala decisión, porque al final sus tratamientos terminan siendo más dolorosos y traumatizantes de lo que hubiesen sido si hubieran ido en un principio.


Y bueno, obviamente no soy la excepción. Detesto el dentista. Me da mucho miedo y además siento que es algo humillante. Tan humillante como ir al ginecólogo. O bueno, no tanto así. Pero me siento realmente patética con la boca abierta de una manera tan ridícula y dejándome hacer un montón de tonterías... ser vista por personas totalmente desconocidas. Uff... Pero, bueno, ese es otro asunto.

El punto es que hace como tres semanas fui por primera vez al dentista después de casi un año sin hacerlo. Uff, no sé si aliviarme o arrepentirme de ello. Quizá lo mejor sería aliviarme, porque al menos pudieron detectarme mis problemas a tiempo. ¿Qué pasó? ¡Que me detectaron 15 caries! Me quedé con cara de WTF!? cuando me dijeron y me quería morir. Nunca en toda mi vida había tenido caries.

Esta es la primera vez que me pasa y obviamente estaba aterrorizada. Y furiosa conmigo misma, porque siempre deseé tener mis dientes perfectos, sin las infames caries y bueno... eso ya no será posible. También furiosa conmigo misma por mi infame adicción a los dulces. Siempre los estoy comiendo...

Y bueno, en fin, tuve que aguantarme el infame miedo y afrontar las consecuencias de mis adicciones. Empezaron a quitarme las caries y recuerdo que en la primer sesión para quitármelas venía toda asustada por mi primera vez. No tenía ni idea de qué carajos me iban a hacer y la verdad es que nunca me había molestado en informarme con mis conocidos, pues prefería mantenerlo en la ignorancia antes que traumatizarme.

No fue tan malo como pensé. Gracias al cielo mis caries las tengo en todas las muelas, (sé que no es bueno, pero en fin) y hasta ahora ya me han quitado ocho (todas las de arriba). Sólo me faltan siete D: Me sentí aliviada al saber que las mías iban recién comenzando y por lo tanto no tendrían que anestesiarme para evitarme el dolor.

Por lo menos ya he aprendido dos cosas del dentista: Si te atiendes las caries desde un principio, cuando no son profundas, no te duele ni un poco cuando te las quitan. Simplemente te taladran el diente, te sale mucha agua y te aburres mucho mientras te lo rellenan con resina xD. Sólo hubo dos caries que fueron más o menos profundas y recuerdo que... era un dolor agudo. Nada agradable.

Y segundo... el dolor de las muelas siendo perforadas profundamente no se compara con el de los dientes frontales. Uff, casi quería gritar del dolor. Me tuvieron que excavar profundamente en el diente frontal debido a una 'fractura del esmalte' (se me partió un pedazo de diente) y sinceramente dolía muchísimo. No dudo que las caries en los dientes frontales o incisivos sean muy, muy, dolorosas. En esa sí que me dolió mucho, pero aún así me aguanté xD. Nada de anestesia para mí.

De todas formas me deprime el hecho de que tendré que ponerme anestesia dentro de un poco. Me van a sacar dos muelas del jucio!! D: Horrible. Horrible. No sé cómo vaya a estar, pero creo que me asusta más el pinchazo que me van a dar para anestesiarme.

Ya lo veremos... No falta mucho, la verdad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario